La generación de biogás a través de la descomposición de desechos orgánicos biodegradables se realiza mediante digestión anaeróbica.
Para que este proceso sea eficiente, es fundamental mantener un balance de carbono y nitrógeno (C:N) entre 16:1 y 25:1. Una proporción menor a 16 inhibe el proceso debido a la formación de amonio, mientras que una proporción mayor a 25 reduce la velocidad del proceso por insuficiencia en el crecimiento celular.
Es ideal que los desechos utilizados se encuentren dentro de este rango de C:N para asegurar una digestión eficaz. No obstante, es posible emplear residuos que no cumplan con esta especificación mezclándolos con otros que compensen el balance de C:N, permitiendo así la co-digestión de diversos materiales.
Los residuos adecuados para este procedimiento incluyen desechos agrícolas como restos de cultivos de maíz y cereales, desechos ganaderos como estiércol y purines, y residuos de industrias alimentarias y pesqueras. Este método no solo beneficia al medio ambiente al prevenir la contaminación de suelos, agua y aire, sino que también contribuye económicamente al crear una cadena de valor en la gestión de residuos.
El biogás obtenido de este proceso se puede refinar para producir biometano, un recurso valioso para la industria y la generación de energía. Este desarrollo es una oportunidad importante en el campo de las energías renovables, fusionando la gestión sostenible de residuos con la generación de energía. Empresas como BGasTech están a la vanguardia en este sector emergente, ofreciendo soluciones integrales.