Original, sorprendente y repleta de humor, Me llamo Lucas y no soy perro nos regala una curiosa historia a través de la ingenua y certera mirada de un perro.
Sin conseguir explicárselo, naturalmente, la vida de perro de Lucas le permite experimentar el amor y el desamor, la compañía y la soledad, el buen trato y el malo, el confort y la pobreza. Y no sólo en su vida, llena de contrastes, sino en la de los hombres y mujeres que le rodean como silencioso observador de sus comportamientos en una historia llena de peripecias.